martes, 8 de febrero de 2011

Los pequeños placeres

La semana pasada quedé con una amiga. Sin saber muy bien cómo ni porqué terminamos enunciando los pequeños placeres que nos proporcionamos normalmente, los que más nos gustan... A parte del sexo, que es evidente, salieron curiosidades interesantes.
Que me rasquen la espalda fuertemente.
Que me masajeen las piernas de abajo a arriba.
Meter los pies dentro de la cama sin calcetines, sintiendo el frío de las sábanas.
Los múltiples delicatessen culinarios.
lavarme los dientes.
Darme una ducha con el agua muy caliente, sientiendo cómo el agua cae por la cara, cabeza y cuerpo.
Dibujo de Gema Laura Díaz
Darme un baño con la luz apagada, iluminada sólo con un par de velas, igualmente el agua debe estar caliente y con sales de baño y espuma.
Sentarme en el comedor con los pies encima de la mesa.
Cenar en la cama viendo una película.
Que me lleven el desayuno a la cama.
Pasearme desnuda por la casa sin tener sensación ni de frío ni de calor.
La sensación de quitarte una mascarilla de la cara.
Recibir un beso tierno.
y un larrrrgo etc...                                               
Lo mejor de esa conversación es que sin quererlo      revivíamos esos momentos, por lo que la conversación misma fue todo un placer.

1 comentario:

  1. Hay que ver lo que es la vida... lo que para ti son pequeños placeres para mi son pequeñas torturas chinas.
    Ducharse con el agua muy caliente... ¿tú sabes lo malo que es eso para la circulación?
    Cenar en la cama... ¿para que se llene de migas que te van a estar pinchando toda la noche sin dejarte dormir? ¿Las mismas que te harán levantarte a media noche para sacudir las sábanas?
    Que te rasquen la espalda fuertemente... y si puede ser un gato con las uñas afiladas mejor, ¿no?
    Jajajaja pues nada tía, para ti todos los placeres XDDDD

    Me gusta tu blog ; )

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